La Confederación Sudamericana de Fútbol buscaba desde hacía un tiempo otro torneo que resultase atractivo para sumar a las actividades anuales de clubes junto a la Copa Libertadores.
Fue así que en 1988 se jugó por primera vez una competencia entre todos los campeones del mayor torneo continental. En total 13 clubes tuvieron el derecho a disputarla: 6 de Argentina, 4 de Brasil, 2 de Uruguay y 1 de Paraguay.
En homenaje a quien fuera presidente de la FIFA tuvo como nombre oficial Copa "João Havelange" aunque quedó conocida popularmente como Supercopa.